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Si ha habido una política de Estado en España (sin bandazos, con amplio apoyo, mirada en el largo plazo, a izquierda y derecha) ha sido ésta.

La energía en España: las claves para entender dónde estamos... y hacia dónde nos dirigimos

Si ha habido una política de Estado en España (sin bandazos, con amplio apoyo, mirada en el largo plazo, a izquierda y derecha) ha sido ésta.

La energía está cara. Muy cara. Tanto que no hablamos de otra cosa. Fotos a los surtidores de gasolina, decretos del Gobierno para prohibir a las tiendas subir o bajar el termostato, rumores de limitaciones en el suministro de gas o en el transporte para el próximo invierno en algunos países de Europa... ¿Y de quién es la culpa? De Putin, claro. Y del cambio climático, también.

Nosotros no vamos aquí a defender al presidente ruso. Porque está claro que su desprecio por el derecho internacional y por la vida humana tiene mucho que ver en lo que está ocurriendo. Pero tampoco podemos olvidar que no sólo en Moscú se decide si podemos poner o no la calefacción. En España, en las últimas décadas, hemos ido tomando decisiones voluntarias y coherentes sobre energía. Decisiones que algunos (por ejemplo, en Libertad Digital), hemos criticado, pero que en general han gozado de un amplio apoyo y consenso. Partidos políticos, medios de comunicación, empresas, sindicatos... apenas ha habido quien se haya quedado al margen. Si ha habido una política de Estado en España (sin bandazos, con mirada en el largo plazo, a izquierda y derecha) ha sido la que tiene que ver con la Energía. Y ahora tenemos ante nosotros las consecuencias de esa política.

La semana pasada, en La Pizarra, hablábamos de Europa, y del lío en el que nos hemos metido en este tema nosotros solos. Hoy nos toca España. Y nos preguntamos qué hemos hecho en las últimas décadas: renovables, gas, nuclear, petróleo... Sobre todas estas fuentes de energía hemos ido tomando decisiones. ¿Sin anticipar cuáles podrían ser las consecuencias? Pues quizás en parte sí, hemos sido algo imprudentes. Pero no podemos decir que no nos avisaron o que no fuimos nosotros los que apostamos por unas alternativas frente a otras. ¿Que al final todo se ha complicado y se ha formado una especie de tormenta perfecta que descargará este invierno sobre nuestras cabezas? Pues también. Pero no miremos a otro lado. Putin tiene su culpa, pero habernos puesto en sus manos ha sido cosa nuestra.

Episodios de La Pizarra y Economía Para Quedarte Sin Amigos dedicados a este tema a lo largo de este año 2022:

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