Francia y Polonia han protagonizado una batalla campal que ha terminado con la suspensión del partido, ya que el equipo galo sufrió un total de cuatro expulsiones y se quedó sin jugadores para reanudar el encuentro.
Tras el partido, Bernard Diomede, técnico Sub-18 de Francia, alzó la voz y asegura que la lamentable imagen dada tendrá consecuencias: "Desafortunadamente, estas cosas aún nos pasan. Para algunos, esta fue la última vez que vistieron la camiseta Bleu porque necesitan entender antes algunas cosas. También hubo jugadores que mantuvieron la calma y trataron de calmar las cosas. Ahora toca analizar quién se comportó correctamente y quién no. Habrá castigos"