Correr bajo el sol parisino estos días probablemente no sea la mejor idea. Hay quienes prefieren refrescarse con los aspersores o buscar una buena sombra donde tumbarse y esperar a que pase la ola de calor. Aunque si este es el caso, va a ser mejor ponerse cómodos ya que las intensas temperaturas que está viviendo Francia están batiendo records, y no precisamente de los buenos, ya que el lunes 18 podría ser, según los expertos, el día más caluroso de toda la historia del país.
Se rondan los 40 grados y la cifra del termómetro no va a comenzar a bajar en un abrir y cerrar de ojos. "Esta ola de calor puede durar al menos de ocho a diez días; pero esa es la duración mínima, lo que significa que podría durar hasta finales de julio", explica un meteorólogo. Hay quien se lo toma con buen humor, pero está claro que el calor no está siendo la mejor compañía para los paseos al aire libre de los residentes y turistas. "Tengo una botella de agua en mi bolso, por suerte hay una fuente de agua no lejos de aquí, así que cuando hace calor, tomamos la botella de agua, la llenamos y nos refrescamos.
Pero sí, nos quedamos en la sombra". Eso dice uno de los muchos que intentan sobrellevar la ola de calor como pueden, y si bien es cierto que hidratarse es importante, hay quienes prefieren tirarse el agua por encima. Cualquier cosa con tal de aliviar el intenso calor que abrasa la torre Eiffel estos días.