La cápsula espacial desarrollada por Space X, la empresa de Elon Musk, ha vuelto a la tierra tras la primera expedición privada a la Estación Espacial Internacional. A bordo, cuatro hombres, todos en perfecto estado, después de pasar dos semanas en el espacio.
El domingo 24 de abril la cápsula Space X Dragon se desacoplaba de la Estación Espacial Internacional para regresar a la Tierra. A bordo, cuatro hombres, la primera expedición privada de la historia. 16 horas después, la cápsula ameriza en el Atlántico.
La fricción, de casi 2000 grados, quema la cápsula. Un barco la sube a bordo y el primero en acercase es un cirujano para comprobar el estado de salud de los "viajeros": un empresario canadiense, un magnate del sector inmobiliario, un ex piloto de las Fuerzas Áereas de Isarel y un astronauta retirado. Todos están bien.
Cada uno ha pagado más de 50 millones de euros por este viaje. Han pasado dos semanas en la estación espacial participando en varios experimentos. Aunque el auténtico ensayo ha sido el de realizar un vuelo privado. El final de esta misión es el primer paso para la creación de una futura estación espacial privada. Mañana ya sale el siguiente vuelo.