Durante la rueda de prensa ofrecida en la sede nacional de Vox en la calle Bambú, Buxadé ha exhibido dos ganchos de hierro que fueron utilizados para atacar a la Policía Nacional y la Guardia Civil en la frontera española, llegando a golpear con ellos el atril desde el que hablaba para denunciar que los medios y la izquierda han pretendido "criminalizar" a los agentes por su actuación contra los inmigrantes, en lugar de señalar que fueron los agredidos.
El portavoz del Comité de Acción Política de Vox ha insistido en distinguir a estos migrantes de los "auténticos refugiados" que, ha remarcado, son los que están abandonando estos días Ucrania. El eurodiputado ha reclamado también que se envíe al Ejército a proteger la frontera con Marruecos.
Además, ha contrastado esa actitud con la que, por ejemplo, tuvieron Polonia y Lituania ante la "invasión migratoria" que, ha dicho, lanzó el presidente ruso, Vladimir Putin, a través de Bielorrusia en lo que considera la "primera fase" de la guerra que libra contra la UE.
En este contexto, ha exigido "la presencia de la Fuerzas Armadas para defender la frontera" de Melilla y que se dote de medios materiales, económicos y jurídicos tanto los militares como a las Fuerzas de Seguridad de Seguridad para ejercer esa labor.
Tras recalcar que no vale con las recetas del "consenso progre" para arreglar esta situación, el también eurodiputado ha remarcado que, mientras "decenas" de agentes son agredidos con garfios, hay "mafias que siguen trabajando coordinadas con las organizaciones no gubernamentales".
Así, ha denunciado que miembros de esas organizaciones y periodistas se apostan cerca de la frontera de Melilla para grabar imágenes con las que "criminalizar" a los policías y guardias civiles heridos en esos "brutales ataques contra la frontera".