El encuentro entre Gremio y Palmeiras terminó en escándalo tras enloquecer parte de los aficionados del Gremio tras el partido. Invadieron el campo y destrozaron la cabina VAR. Antes los manifestantes habían intentado ingresar al túnel de vestuarios para atacar a sus propios jugadores. Sin embargo, no pudieron acceder a los vestuarios y optaron por entrar al campo de juego.
Molestos porque a raíz de la tecnología el árbitro Savio Pereira Sampaio le anuló un gol, pero sobre todo porque el equipo marcha en el puesto 19, en zona de descenso, decenas de seguidores del Gremio de Porto Alegre estallaron de furia. Mediante la tecnología, el árbitro pitó un penalti para el Palmeiras que fue el empate a 1. Además el VAR anuló el que suponía entonces el tanto del empate a 2. Sin embargo, el tanto de Manoel fue anulado a instancias del VAR por posición adelantada.
Las acciones en el Arena do Gremio, donde también ocurrieron incidentes entre aficionados de ambos clubes en las tribunas, finalizaron con un triunfo para el Verdao 3 a 1, que se mantiene con 52 puntos como único escolta del líder del Brasileirao Atlético Mineiro (59). Diego Souza puso en ventaja al equipo local, a los 12 minutos, Raphael Veiga (46′, 50′) y Breno Henrique (94′) anotaron para la visita.
La justicia deportiva de Brasil prevé en hechos de esta índole sanciones de hasta diez partidos sin público en su estadio.
El Gremio se ubica penúltimo en la tabla con solo 26 puntos en 27 partidos jugados (7 ganados, 5 empatados y 15 perdidos) y está a seis puntos de la salvación.