Saltos en pareja con instructor desde 4.000 metros de altura. Lo habitual es hacer estos saltos como mucho a 3.000 metros, pero aquí está el subidón de adrenalina. Aquí se mantiene la caída libre durante un minuto hasta que se abre el paracaídas a los 1.800 metros de altura. Y mientras tanto se cae a 200 km/h mientras se disfruta de unas vistas espectaculares.
De momento, se trata de una atracción que está causando furor en el turismo interior de China, pero cuyos organizadores esperan que sirva de reclamo en el extranjero. Todo un reto para los amantes del riesgo.