El presidente del país, Teodoro Obiang, asegura que se han producido por una negligencia en un cuartel militar de la zona y que se depurarán responsabilidades. Casi todos los edificios de la ciudad están dañados y los hospitales están desbordados. El presidente asegura que la causa ha sido el "manejo negligente de dinamita".
Mientras los equipos de rescate continúan rebuscando entre los escombros a personas atrapadas.Los daños materiales también han sido enormes. El ministro de Asuntos Exteriores pide ayuda internacional. Para reconstruir una ciudad devastada, donde muchos edificios y viviendas se han venido abajo y cuyo paisaje estuvo durante horas presidido por enormes columnas de humo.