El hoyo en uno que firmó Rahm con cuatro ranas incluidas en el lago que protege en el hoyo 16 es el segundo consecutivo. Este lunes el golfista español embocó de un solo golpe una bola en otro par 3, como había hecho el lunes en el hoyo 4.
Aunque la estadística no recoge cuál es la probabilidad de que se consigan dos hoyos en uno en dos días consecutivos, entre los profesionales lograr un hoyo en 1 es 2.500 a 1.
Rahm aseguró tras su tremendo golpe que “es algo que se hace aquí cada año. En estas circunstancias, Rickie Fowler y yo hemos dudado de hacerlo, pero al final es tradición. Es un buen golpe ponerla en green y el hecho de que la haya metido en el hoyo es increíble”.
Todos los años durante las rondas de prácticas del Masters, los jugadores intentan poner la bola en el green del 16 botándola en el agua. “Meter dos hoyos en uno en dos días de esta manera es una señal más, solo espero que la suerte no haya hecho más que comenzar en lugar de empezar a restarla antes del torneo”, el deseo del mejor golfista español del momento.