Un error desde un saque de puerta de Kaspar Schmeichel que termina en penalti para el Bournemouth fue el comienzo de una remontada frenética de los cherries sobre el Leicester.
El partido comenzó con control del equipo de Brendan Rodgers, de hecho se fueron al descanso gracias a un tanto de su goleador estrella, Vardy. La remontada comenzó en el minuto 63.
Un error de saque de puerta del guardameta foxy Kaspar Scheichel, que golpea en un compañero, cae en los pies de un jugador del Bournemouth y es derribado en el área. Penalti que marca Junior Stanislas.
No pasa ni un minuto y en una jugada en solitario de Dominic Solanke marca el dos a uno. Sin embargo la jugada no acaba ahí ya que un jugador local se dirige a por el balón y es empujado por Söyüncü que es expulsado por el colegiado.
Lo peor le llega al equipo visitante en los últimos 10 minutos que recibe dos goles, uno de, nuevamente Solanke y Jonny Evans en propia meta. Un resultado que le impide superar a un Chelsea que no pasa por su mejor momento.