Una de las claves que explica su escaso protagonismo es que no ha mejorado nada en la toma de decisiones ni a la hora de finalizar las jugadas. Desde el Real Madrid se le pidió en verano que trabajara por su cuenta en este aspecto, a lo que Vinícius hizo caso omiso.
Tras el partido ante el Getafe, el brasileño fue reclamado por el preparador físico para realizar unos ejercicios junto a los suplentes (Odiozola, Nacho y Rodrygo) que no habían disputado ningún minuto ante el conjunto azulón. No estaban Fede Valverde, que saltó al campo junto con Vinícius, ni Jovic, que apenas disputó 10 minutos.
Vinícius volvió a mostrar su pasotismo al igual que en verano, en este caso con las órdenes del preparador físico. Las cámaras de #Vamos de Movistar+ captaron su evidente falta de motivación. "Yo... no lo veo mucho", comentaba el brasileño argumentando estar cansado tras esos 20 minutos de partido. Finalmente, tras dos sprints al trotre cochinero, el brasileño acabó por retirarse a vestuarios.
A sus 19 años, algunos en el club comienzan a pensar que la fama se le ha subido a la cabeza y que la humildad no es una de sus virtudes. Vinícius aún está a tiempo de cerrarles la boca.