Antoine Griezmann llegó al Metropolitano para enfrentarse al Atlético de Madrid por primera vez desde que este verano cambió la capital de España por el Barcelona. Ayer en la victoria por 0-1 de su equipo, Griezmann fue increpado, insultado e incluso le desearon la muerte.
Durante el partido participó poco, tuvo una oportunidad clara en los 90 minutos y poco más, pero un gesto suyo llegando al vestuario visitante no pasó desapercibido para nadie y menos para los atléticos.
En el túnel que da acceso a los vestuarios, el Community Manager del Barcelona grabó el momento justo en el que Griezmann pasó al lado de una foto de Simeone. Antoine tocó la imagen de forma cariñosa y siguió su camino. Las redes sociales ya han valorado para bien y para mal este curioso gesto.