Los enfrentamientos se han producido en los tres campus de la Universidad Pompeu Fabra y en la Escuela de Ingeniería de Manresa, de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), en los que se habían quedado más de un centenar de estudiantes a dormir.
Cientos de estudiantes han intentado acceder a las aulas para ir a clase y se han enfrentado a los piquetes, que habían bloquado los accesos, amontonando sillas y mesas en las puertas.
La situación ha sido especialmente tensa en el campus de la Ciutadella, cuando un grupo de estudiantes que quería acceder a las aulas y no secunda la huelga ha saltado la verja del recinto, que la universidad no había abierto. De hecho, la Pompeu Fabra había recomendado a través de las redes sociales no acudir al campus "por seguridad".