LeBron James es puro genio y pura competitividad, pero siempre ha tenido un "niño" interior que no ha desaparecido pese a tener ya 34 años. El jugador de Los Ángeles Lakers está aún de pretemporada y se divierte, por ejemplo, viendo jugar a su hijo Bronnie.
Lebron está siendo muy criticado en EEUU por su comportamiento en el último partido de instituto de su hijo Bronnie. Durante el mismo y tras un espectacular mate del adolescente, James se volvió loco en la celebración y por esa razón está siendo criticado. ¿Excesivo o simplemente divertido? Ustedes dirán al verlo.