Landaluce plantea su libro como un instrumento de destrucción masiva contra esa idea de "que España es la prolongación del franquismo", argumentos para acabar con la "sensación negro-legendaria de nosotros mismos", infundada en datos y hechos históricos, y que según la autora proviene del movimiento 15M y la crisis económica.
La periodista de El Mundo ve una "alianza letal entre la superioridad moral de la izquierda y el supremacismo-racismo de la nacionalista".