Fuerzas especiales de la Policía gala han abatido a los dos individuos, que llegaron a tomar cinco rehenes.
Los hombres, armados con cuchillos, entraron en la iglesia por la puerta trasera durante la eucaristía, cerraron las puertas y secuestraron a cinco personas: un sacerdote, dos religiosas y dos fieles. Otra monja habría conseguido escapar y dar la voz de la alarma. En torno a las 11:00 horas, la Policía abatió a los dos secuestradores, que habían salido al atrio de la iglesia.