El partido que enfrentó el pasado lunes a Manchester United y Real Madrid dejó muchas imágenes para el recuerdo, incluida la estrepitosa tanda de penaltis que se vivió sobre el césped del Levis Stadium. Uno de los protagonistas era José Mourinho que volvía, de nuevo, a enfrentarse a su ex equipo.
Durante el verano pasado y al inicio del mercado estival de 2017, el nombre de Gareth Bale sonó muy fuerte para reforzar la actual plantilla de los 'diablos rojos'. Antes del inicio del choque, el portugués esperó en la salida de vestuarios a algunos de sus antiguos pupilos para saludarles. Pasaron uno tras otro, con algunas caricias y palabras de cariño, pero Mou se detuvo con uno en particular: Bale.
"No puedo comprarte porque no hablas", fue lo que le susurró al oído al futbolista galés. Inconsciente de la cámara que se mantenía observando cada uno de sus movimientos, al entrenador se le escapó este mensaje. El club blanco deberá andarse con ojo si no quiere que se de a la fuga una de sus estrellas, poniendo rumbo a Inglaterra.