"Nunca debieron celebrarse estas elecciones. Nunca unas elecciones autonómicas tuvieron que admitirse como si fueran un plebiscito contra España o a favor de España.
El problema de estas elecciones es que además de para ver qué media Cataluña está loca perdida y no tiene remedio, para ver que hay otra media que no.
Lo que vamos a ver si en Cataluña cabe algún tonto menos. Pero en todo caso, el lunes, la historia continúa. No hay nada decidido y además todos los errores se pueden enmendar y el de estas elecciones también".