"El Ministro de Justicia, refiriéndose a su hijo, el que borracho parece que atropelló a una señora y luego se refugió en el garaje de su padre, el Ministro de Justicia, ha dicho que los asuntos de familia se tratan en familia. No, no, no, no, no. Los delitos del hijo del Ministro de Justicia suelen tratarse en el parlamento en los países civilizados, por que suele, cuando el padre encubre un delito del hijo, suelen pedir su dimisión.
Pero no me extraña esa doctrina por que es la que ha venido utilizando Gallardón y su empleado, digamos, el fiscal general del Estado, en lo que se refiere a la infanta Cristina de Borbón y a su mangarín como le llaman los castizos, es decir, esa pandilla que, amparándose en la Corona ha estado trincando dinero público de empresas privadas en cantidades enormes y que, según ha dicho hoy el juez Castro pasado mañana desembocará en la imputación de la hermana del Rey.
Los asuntos de Familia Real no se tratan en la familia real. Los asuntos de la familia del Ministro de Justicia no se tratan en familia, se tratan atendiendo al cargo que ocupen. Cuando en la Familia Real se dispone de privilegios se tienen obligaciones. Como dijo muy bien en su discurso inaugural el nuevo Rey Felipe VI hay que respetar escrupulosamente la independencia del poder judicial y la Corona debe ser íntegra, honesta y transparente. íntegros no han sido, trasparentes, bueno, transparentes a la hora de llevárselo y a la cara dura que le han echado y en cuanto a la honestidad, más bien honradez brilla por su ausencia.
¿Va a seguir el gobierno protegiendo a esta rama delincuente de la Familia Real o va a respetar al Rey y a su discurso? Es decir, ¿va a estar el gobierno por la virtud monárquica o por la golfería tradicional? El gobierno está con el nuevo Rey o siguen las costumbres del antiguo."