El informe de previsiones de crecimiento del FMI ha caído como un jarro de agua fría en España. Desmonta los Presupuestos del Gobierno para el próximo año, empeora las previsiones de PIB y del paro. Es más, estima que uno de cada cuatro españoles estará en situación de desempleo en 2013, y que el déficit no bajará del 3% al menos hasta 2017.
Son tantas las informaciones y las opiniones venidas y llegadas de distintos puntos que ya parece que el posible rescate a España se ha convertido para muchos en una caricatura de la pobreza. Y lo peor, para aclarar la confusión generada, el Gobierno pasa más tiempo tratando de aclarar las dudas, que en ponerse manos a la obra para evitar la ayuda europea.
A cuenta de este informe se ha producido un nuevo rifi rafe en el Congreso. Las Sorayas se acusan, una al partido de la otra, de ser responsables de la difícil situación por la que atraviesan España y los españoles.
Mientras los nacionalistas continúan con su amenaza soberanista, aunque pidiendo dinero. Por el momento, el Congreso de los Diputados ha rechazado una iniciativa de ERC que pedía al Gobierno central que transfiriera su competencia exclusiva de convocar referéndum a la Generalidad de Cataluña. Algo que el presidente catalán, Artur Mas, podría ignorar llegado el momento.
Y esto, a pesar del mensaje del propio presidente Mariano Rajoy que, hace unos días, insistía en la importancia de la unión y la colaboración entre territorios en un mundo globalizado donde las fronteras son prácticamente teóricas y tienden a desaparecer.
En el trasfondo político se mueven los sindicatos que ya estudian fechas para celebrar una nueva huelga general.
Esta semana analizan estos y otros temas de la economía junto a Carmen Tomás, Fernando Rayón y Yolanda Gómez en Economía Para Todos.